Intervenimos en una vivienda de reciente construcción en la que el problema principal para sus propietarios era la falta de espacios de almacenaje.

Aprovechando la intervención se tratan las superficies de las estancias en las que intervenimos, renovando la decoración para conseguir espacios combinados que aporten calidez y calma.

Para realizar este proyecto se realiza une estudio previo muy minucioso, en el que se tiene en cuenta qué elementos deben ser almacenados, cuánto ocupan o cómo los utiliza cada miembro de la familia. Además se tiene en cuenta los espacios existentes y la posibilidad de reorganizarlos.

El objetivo es dotar a la vivienda de un estilo poco recargado, incluyendo nuevos espacios de almacenaje que respeten los existentes, que tengan una gran capacidad de almacenaje y sean cómodos de usar, dando a cada miembro de la familia espacios propios adaptados a sus necesidades y asegurándonos que seguirán siendo funcionales con el paso de los años.